Vaticano, 15 Jul. 23 (ACI Prensa).- El pasado 15 de junio, el P. Johan Verschueren, autoridad jesuita y superior del P. Marko Rupnik, anunció la expulsión del sacerdote de la Compañía de Jesús ante su “reiterada negativa” de hacer frente a las denuncias de abusos sexuales.
P. Marko Rupnik, que además fue excomulgado por confesar a una de sus víctimas, tenía hasta ayer, viernes 14 de julio, para apelar de acuerdo a las normas canónicas. Al no haberlo hecho, el sacerdote está oficialmente fuera de la orden.
Varios medios informaron que el esloveno se trasladaría a vivir a Croacia, en concreto a la Diócesis de Split-Makarska. ACI Prensa se puso en contacto con su superior para confirmar esta información pero no ha obtenido respuesta hasta la publicación de esta noticia.
El sacerdote, que habría abusado física y psicológicamente de numerosas religiosas durante su estancia en la Comunidad de Loyola en Eslovenia y también en Roma, ha salido de la Orden sin dar ninguna explicación tanto a sus superiores como a las víctimas.
Defensa del Centro AlettiDos días después de la publicación del comunicado de los jesuitas, el Centro Aletti –fundado por Rupnik en Roma— difundió una carta en defensa del sacerdote.
El texto señalaba que el 21 de enero de este año, fue el propio Rupnik quien presentó a la Compañía de Jesús, “observando todas las condiciones canónicas requeridas, una solicitud para poder dejar la Orden”.
La misiva explicaba que la decisión del acusado de abusar de numerosas religiosas se debía a que “la confianza en sus superiores había cesado por completo una vez que éstos lamentablemente dieron repetidas pruebas de favorecer una campaña mediática basada en acusaciones difamatorias y no probadas”.
Según los miembros del centro artístico, la Compañía de Jesús debería haber brindado a la prensa “información correcta basada en hechos y documentos, en su posesión, que demuestren una verdad diferente a la que era publicada”.
Además, la misiva aseguraba que “por las mismas razones de desconfianza hacia los superiores, los demás jesuitas del Centro Aletti también han solicitado un indulto para salir de la Compañía y están a la espera de que concluya el relativo procedimiento, a fin de continuar el ejercicio de su ministerio sacerdotal”.
La Santa Sede no ha hecho ninguna declaración al respecto. Durante una entrevista en enero, el Papa Francisco fue preguntado si tuvo algún papel en la decisión del caso del P. Marko Rupnik, a lo que contestó: “Nada”.
“Estuve en una pequeña cosa procesual, que vino a un pasado a la Congregación de la Fe. Pero yo no pasé nada. Que siga con el tribunal normal, porque si no se dividen los caminos procesuales, y se embarulla todo”, señaló.
El caso RupnikEl P. Marko Rupnik es cofundador de la Comunidad Loyola en Eslovenia, surgida en la década de 1980, donde habría abusado de religiosas adultas.
Tras una investigación preliminar encargada a la Compañía de Jesús, la Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF) “determinó que los hechos en cuestión debían ser considerados prescritos y por lo tanto cerró el caso a principios de octubre de este año 2022”, señalaba un comunicado de los jesuitas del 2 de diciembre.
El Superior General de la Compañía de Jesús, P. Arturo Sosa, confirmó el 14 de diciembre que Rupnik había sido excomulgado en mayo de 2020 por haber confesado a una de sus víctimas, una medida que fue levantada ese mismo mes.
En diciembre de 2022, una ex religiosa que ha preferido que no se conozca su verdadera identidad, relató en detalle cómo fue su “descenso al infierno” con los abusos sexuales y de conciencia que habría sufrido por parte del P. Rupnik.
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