VATICANO, 03 Ago. 22 (ACI Prensa).- El Papa Francisco saludó este 3 de agosto a los niños del curso de verano en el Vaticano junto a sus papás y por los organizadores de esta iniciativa.
Al terminar la Audiencia General de este miércoles el Papa dirigió un particular saludo a los niños del curso de verano que “habían permanecido en silencio hasta aquel momento” por lo que el Santo Padre dijo que era “comprensible que hicieran un poco de ruido”.
El Papa saludó a los pequeños que vestían camisetas coloridas y que fueron acompañados por sus padres y por los animadores del curso de verano a quienes agradeció “su valioso trabajo, por la labor que han realizado: gracias”, dijo el Papa.
“De manera especial quiero agradecer a don Franco, el capellán de la Gendarmería, el alma espiritual del Vaticano, que como buen salesiano supo plantar esta semilla, hacer este centro de verano: este es ya el tercer año. Gracias, don Franco”, indicó el Santo Padre.
Curso de verano 2022El actual curso de verano en el Vaticano tiene por tema “Sueños gigantes” y concluirá el próximo viernes 5 de agosto.
Se trata de la tercera edición del “Estate Ragazzi”, un curso de verano dirigido a los hijos de empleados de la Santa Sede residentes en Roma.
Desde el año 2020, el Papa Francisco confió a la comunidad salesiana que vive en el Vaticano organizar esta iniciativa para los hijos de los empleados del Vaticano con edades a partir de los 5 hasta los 13 años.
El equipo que lleva adelante esta experiencia breve de “oratorio” está formado por religiosos salesianos junto a religiosas Hijas de María Auxiliadora y algunos animadores voluntarios laicos.
En esta línea, la iniciativa consiste en una experiencia formativa en un clima de fiesta junto a actividades lúdicas y recreativas.
El tema de esta edición de este curso de verano dentro de las murallas vaticanas se inspiró en el libro "The Big Gentle Giant" (el gran gigante gentil) de Roald Dahl y la propuesta consistió en que los niños colocaran al centro los sueños de cada uno y ver cómo Jesús los acompaña más allá de los desafíos cotidianos.
Finalmente, según explicaron los organizadores, la vida de San Juan Bosco fue presentada como ejemplo de un niño que “creyó en los sueños de Dios, se hizo sacerdote y dedicó su vida entera a los jóvenes”.
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