En la misiva, Francisco agradece el trabajo de esta organización, considerándolo un “generoso gesto de caridad”.
En ella también recuerda que “estamos atravesando tiempos muy difíciles en los que la corrupción se insinúa por doquier”. Por ello exhorta a los miembros de la Consulta a servir como “una levadura preciosa para toda la sociedad”. Algo que “saben bien las víctimas de la usura y del juego de azar puesto que mediante su ayuda pueden emprender un camino nuevo”.
También los invitó a contagiar a todos “la esperanza para que sean cada vez más numerosos los que salgan del 'túnel de la usura y del azar'”.
En el encuentro con esta organización el 3 de febrero, el Papa tildó a la usura de “pecado grave” ya que “mata la vida, pisotea la dignidad de las personas, es vehículo de corrupción e impide el bien común”.
“La usura es un mal antiguo que, lamentablemente, todavía actúa, como una serpiente, estrangulando a sus víctimas. Es necesario prevenirla, sustrayendo a las personas de la patología de la deuda adquirida para la subsistencia o para salvar una empresa”, dijo también.
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El Papa Francisco afirma que la usura es un pecado grave que mata la vida y pisotea la dignidad de las personas @Pontifex_es #Vaticano https://t.co/z8aMOS7Yp1
— ACI Prensa (@aciprensa) 3 de febrero de 2018
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