CIUDAD DE MÉXICO, 25 Nov. 19 (ACI Prensa).- El polémico sacerdote Alejandro Solalinde, que meses atrás aseguraba que la Iglesia Católica necesita “una mujer Papa joven” se distanció de la ayuda a los migrantes, que ha caracterizado su ministerio, y aseguró que “la prioridad es México”.
Entrevistado recientemente por el sitio web salvadoreño El Faro, el P. Solalinde defendió al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y sus controvertidas medidas para frenar el paso de inmigrantes que llegan desde Centroamérica, como la de destinar miles de agentes de la Guardia Nacional al sur del país.
Cuestionado sobre si ha cambiado desde hace una década, cuando según su entrevistador el sacerdote “era muy pobre, durmiendo en una colchoneta, o en aquel carrito que tenías”, y poseía un “compromiso inquebrantable con los migrantes centroamericanos” el P. Solalinde dijo que “he cambiado porque la vida cambia y hay que seguir a los migrantes de otra manera”.
Tras confirmar que ha depositado su confianza en López Obrador, a quien asesoró durante su campaña presidencial, el P. Solalinde dijo que actualmente caminar con los migrantes “ya no significa subirme a los trenes ni siquiera esperarlos en el albergue. Están llegando muy pocos. Los migrantes ya están en otro lado. Las cosas cambiaron”.
El P. Solalinde es conocido en México tanto por su trabajo con migrantes como por las polémicas en las que ha estado envuelto.
En una entrevista con la revista pornográfica Playboy en 2012, el P. Solalinde se definió como “descendiente” de la teología de la liberación, y calificó de un “milagro” y “algo maravilloso” haber tenido relaciones sexuales con una mujer a los cuatro años de haber sido ordenado sacerdote.
En 2017, el sacerdote mexicano dijo al diario mexicano La Jornada que la Iglesia debería tener respeto por “la diversidad sexual”, y que quizás “más adelantito, a lo mejor sí” podría casar a una pareja homosexual.
En una entrevista realizada el 28 de febrero de este año para la radio mexicana Expreso, el P. Solalinde dijo que la Iglesia debería dejar como algo “opcional” el celibato sacerdotal.
Ya en marzo de 2018, el hoy Obispo Emérito de Veracruz (México), Mons. Luis Felipe Gallardo, aseguró que el sacerdote Alejandro Solalinde “recibe mucho dinero” y tiene prohibido celebrar Misa en su diócesis.
En esa ocasión, Mons. Gallardo dijo que el P. Solalinde “tiene subsidios, y subsidios muy fuertes, tiene economía, tiene dinero".
En su entrevista con El Faro, el P. Solalinde calificó de “una gran manipulación masiva” las caravanas de migrantes organizadas en los últimos meses de 2018, que buscaban llegar desde Honduras a Estados Unidos.
Las caravanas fueron organizadas por Pueblo Sin Fronteras, grupo fundado por Irineo Mujica. Según el P. Solalinde, Mujica “anda libre porque ese juez tuvo miedo y es corrupto”.
Según el sacerdote, director de las casas de acogida a migrantes Hermanos en el Camino, hay videos “en YouTube” que probarían que desde Honduras mujeres recibieron dólares para emprender el difícil camino hacia el norte.
“Además llevaban droga, porque llevaban droga y armas blancas”, acusó el P. Solalinde.
El P. Solalinde dijo que la Guardia Nacional, a la que la Iglesia en México acusó de ser un “muro humano” contra los migrantes, no fue creada por López Obrador para evitar el paso desde Centroamérica, sino “porque tenemos un problema de seguridad interior. ¿Que coincidió lo de la presión (del presidente de Estados Unidos, Donald) Trump? Claro. Coincidió”.
Para el sacerdote mexicano “ningún extranjero” va a entender “el proceso de emergencia que tenemos”, pues “aquí en México necesitamos liberarnos de los poderes fácticos capitalistas”.
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