VATICANO, 14 Nov. 19 (ACI Prensa).- El Papa Francisco animó a los estudiantes universitarios a “abrir corazones y mentes” y “a no contentarse con las corrientes de moda, con el pensamiento aparentemente hegemónico de un mundo en el que diversidad es conflicto”.
El Santo Padre hizo esta invitación a los estudiantes y profesores de la Universidad Libre de María Santísima Asunta (LUMSA), a quienes recibió este jueves 14 de noviembre en el Aula Pablo VI del Vaticano.
En su discurso, el Pontífice citó cuatro responsabilidades que tienen hoy los miembros de la comunidad universitaria. En primer lugar “la responsabilidad de coherencia, o de fidelidad y de comunidad”.
“La comunidad universitaria trabaja siempre para el futuro, pero lo hace con una fuerte conciencia de las raíces y una percepción realista del presente. Por ello, miro con confianza a las nuevas generaciones que se forman en la universidad. Son protagonistas conscientes del cambio que nace de la visión y de la coherencia a partir de una perspectiva comunitaria. En este sentido, la calidad y el estilo de las relaciones que vivís en la universidad es fundamental”.
En segundo lugar, “una responsabilidad cultural y, diría, misionera delante del mundo”. “No debemos tener miedo de usar esta palabra (verdad) en un espíritu de diálogo sereno. Verdad, libertad, bien: sobre esas directrices animo a que vuestra universidad sepa ofrecer una formación en la que, trasversalmente al saber curricular, haya espacio para la formación integral de la persona”.
En tercer lugar, indicó, está la responsabilidad social de la universidad. “Activar círculos virtuosos de desarrollo integral con las fuerzas vivas de la sociedad. Se necesita la valentía de ponerse en juego”, afirmó.
La cuarta y última responsabilidad citada por el Pontífice es la “responsabilidad interuniversitaria. Europa fue la cuna de la universidad, pero debe reencontrar el sentido. Vuestra universidad continúa trabajando en el sistema universitario a todos los niveles y, en particular, con las universidades católicas con el fin de crear un clima fructífero de cooperación, de intercambio y de ayuda mutua a la hora de construir proyectos didácticos y de investigación innovadores, orientados a la caridad intelectual que no regatea a la verdad y que no se contenta con la mediocridad”.
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