, 09 Sep. 22 (ACI Prensa).- "La masonería es un tipo de culto al diablo”. Así ha respondido el sacerdote español P. José Luis López, perteneciente a la Archidiócesis de Sevilla (España), a una cuenta de promoción de la masonería en Twitter.
Con motivo del fallecimiento de la Reina Isabel II de Inglaterra, la cuenta @fmasoneria había afrimado que “la masonería de corte anglosajón, presente en todo el mundo, está muy ligada a la Casa Real Británica”.
A continuación, el mensaje especifica: “con la muerte de Isabel II buena parte de la masonería está de luto”. El texto se acompaña con una imagen de la monarca durante una ceremonia solemne celebrada en la catedral anglicana de San Pablo.
El piso damasquinado del templo ofrece una mayor vinculación visual con la masonería, cuyas logias tienen el mismo patrón de cuadros blancos y negros en sus suelos.
A este mensaje se añade otro en el que se especifica que “el Duque de Kent, primo de la Reina Isabel II, es el Gran Maestro de la Gran Logia Unida de Inglaterra”.
El Duque de Kent, primo de la reina Isabel II, es el Gran Maestro de la Gran Logia Unida de Inglaterra, lo que le convierte en un referente para todos los masones que practican nuestro arte en la tradición denominada regular o anglosajona. pic.twitter.com/8xDRfZsnCn
— Francmasonería ∴ (@fmasoneria) September 8, 2022El mensaje completo del P. José Luis López, párroco de varios pueblos de la Archidiócesis de Sevilla, ha sido:
“La masonería es un tipo de culto al diablo y a sus poderes. Pero tenemos la certeza que vuestro jefe fue vencido por Cristo en el árbol de Cruz, a vosotros sus seguidores al igual que al q adoráis solo os queda el pataleo”.
La masonería es un tipo de culto al diablo y a sus poderes. Pero tenemos la certeza que vuestro jefe fue vencido por Cristo en el árbol de Cruz, a vosotros sus seguidores al igual que al q adoráis solo os queda el pataleo.
— Rvdo. Padre José Luis (@jllopezreyes) September 9, 2022 ¿Qué dice la Iglesia católica de la masonería?El Código de Derecho Canónico afirma en su número 1374 que “quien se inscribe en una asociación que maquina contra la Iglesia debe ser castigado con una pena justa; quien promueve o dirige esa asociación, ha de ser castigado con entredicho”.
Esta redacción aprobada en 1983 por San Juan Pablo II, difería de la versión de 1917 en dos cuestiones. La primera, es que la pena no es automática. Y, la segunda, que no se menciona expresamente a la masonería.
La controversia que esto supuso en algunos ambientes intra y extra eclesiales llevó al entonces Cardenal Joseph Ratzinger, Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, a emitir una “Declaración sobre la masonería”.
En ella se afirma que “no ha cambiado el juicio negativo de la Iglesia respecto de las asociaciones masónicas, porque sus principios siempre han sido considerados inconciliables con la doctrina de la Iglesia”.
Por lo tanto, añadía, “la afiliación a las mismas sigue prohibida por la Iglesia. Los fieles que pertenezcan a asociaciones masónicas se hallan en estado de pecado grave y no pueden acercarse a la santa comunión”.
0 comentarios:
Publicar un comentario