VATICANO, 30 Oct. 19 (ACI Prensa).- El que fuera hasta el 14 de octubre Comandante de la Gendarmería del Vaticano y encargado de la seguridad del Papa, Domenico Gianni, recibió este miércoles 30 el título de Caballero de Gran Cruz de la Orden Piana, la más alta condecoración que confiere la Santa Sede a los laicos.
“A las 10:30 de hoy, en el curso de una ceremonia en el Palacio de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano, el Excomandante del Cuerpo de la Gendarmería, Domenico Gianni, recibió el título de Caballero de Gran Cruz de la Orden Piana, la más alta condecoración reservada a los laicos de la Santa Sede”, señala una nota enviada a los periodistas por parte de Matteo Bruni, director de la Oficina de Prensa del Vaticano.
“La condecoración fue entregada, a nombre del Santo Padre, por su Eminencia el Cardenal Giuseppe Bertello, Presidente de la Gobernación del Estado, en presencia del Sustituto de la Secretaría de Estado, Mons. Edgar Peña Parra, del Secretario de la Gobernación, Mons Fernando Vérgez Alzaga, del nuevo Comandante del Cuerpo de la Gendarmería, Gianluca Gauzzi Broccoletti, y del Vicecomandante, Davide Giulietti”, prosigue el texto.
Durante la ceremonia, el Cardenal Bertello expresó su aprecio por el trabajo desarrollado por Domenico Giani “y la gratitud del Santo Padre, de la Gobernación y de la Secretaría de Estado, por los largos años de fiel servicio a la Iglesia y al Sucesor de Pedro”.
La renuncia de Giani se debió, según un comunicado de prensa difundido por el Vaticano, a que el “2 de octubre algunos medios de comunicación publicaron una orden confidencial” firmada por él “sobre las consecuencias de ciertas limitaciones administrativas impuestas a personal de la Santa Sede”.
El comunicado hacía referencia al memorando interno publicado por el diario italiano L’Espresso sobre la suspensión de cinco funcionarios del Vaticano tras el allanamiento realizado en oficinas de la Secretaría de Estado el 1 de octubre.
Además, se resaltaba que “el comandante no tiene ninguna responsabilidad personal en el desarrollo de los acontecimientos” y que la renuncia se debía a que la filtración de la orden “perjudicaba gravemente tanto la dignidad de las personas implicadas como la imagen de la Gendarmería”.
Gauzzi y Giulietti fueron nombrados días después de la renuncia de Gianni.
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