Vaticano, 12 Sep. 18 (ACI Prensa).- El Papa Francisco aceptó la renuncia del Obispo de Formosa (Brasil), Mons. José Ronaldo Ribeiro, acusado junto a otros 5 sacerdotes de malversar fondos de la Iglesia en marzo de 2018.
Así lo dio a conocer este miércoles 12 de septiembre la Sala de Prensa de la Santa Sede, que también informó del nombramiento del Arzobispo de Uberaba, Mons. Paulo Mendes Peixoto, como Administrador Apostólico Sede Vacante de la Diócesis de Formosa.
Mons. Ronaldo tiene 61 años de edad y, en condiciones regulares, su renuncia debía presentarla todavía en 14 años más, cuando cumpliera 75, la edad límite para el servicio pastoral de los obispos al mando de las diócesis católicas del mundo.
Aunque el comunicado del Vaticano no menciona el caso, en marzo de este año Mons. Ronaldo y otros cinco sacerdotes fueron arrestados y encarcelados con prisión preventiva en el marco de la operación “Caifás”, ordenada por el Ministerio Público de Goiás.
Fueron acusados de desviar 2 millones de reales (unos 600 mil dólares) y de usar el dinero de las parroquias de la Diócesis de Formosa para comprar una hacienda de ganado y una casa de loterías.
El dinero malversado proviene de diezmos, donaciones, estipendios por bautismos y matrimonios de los templos ubicados en los municipios de Posse, Formosa y Planaltina, en los alrededores de Brasilia, la capital de Brasil.
Según las autoridades, el desvío de dinero se realiza desde 2015, cuando el Obispo tomó posesión de la Diócesis de Formosa.
El martes 17 de abril un tribunal de justicia aceptó un hábeas corpus presentado por Mons. Ronaldo. Luego se procedió a su liberación y a la de los otros 5 presbíteros.
El entonces Obispo de Formosa afirmó ser inocente de las acusaciones y dijo que fueron víctimas de un plan para desmoralizarlos, siendo “acusados sin pruebas”.
El Prelado volvió a la residencia episcopal de Formosa y no aceptó el consejo de residir en la casa del clero para los sacerdotes enfermos y ancianos.
Según el diario Metrópolis, durante la audiencia de instrucción del caso celebrada el pasado lunes 10 de septiembre, Mons. Ronaldo solicitó al juez autorización para vivir en Brasilia, pedido concedido por el magistrado Fernando Oliveira Maciel. Durante la madrugada, el obispo dejó la residencia episcopal.
El P. João Manoel Lopes, vicario general de la diócesis y administrador parroquial de la Catedral diocesana, dio su testimonio en la audiencia y dijo que el Obispo se habría apropiado de dinero proveniente de las confirmaciones.
“El testimonio del párroco duró 4 horas y media. Al juez Fernando Oliveira Samuel, el religioso afirmó que le parecieron extrañas algunas prácticas dentro de la diócesis. Los fondos recaudados con las confirmaciones, por ejemplo, se dirigían a la cuenta privada de don José Ronaldo”, dice la edición de hoy metrópolis.
Las investigaciones del caso comenzaron en diciembre de 2017, cuando se verificó que los gastos de la casa del Obispo pasaron de 5 mil a 35 mil reales mensuales, desde que Mons. Ronaldo asumió la diócesis.
Por ese motivo los fieles locales solicitaron que se diera a conocer las cuentas de la diócesis y señalaron que no contribuirían económicamente mientras no se tomara esta medida.
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