BUENOS AIRES, 20 Abr. 18 (ACI Prensa).- Una multitud llegó hasta la Catedral Metropolitana Santísima Trinidad de Buenos Aires el jueves 19 de abril, para dar la bienvenida a la reliquia del corazón de San Pío de Pietrelcina.
Previamente, la reliquia estuvo ocho días en Paraguay con motivo de los 30 años de la presencia de los Hermanos Franciscanos Capuchinos en ese país. Ahora recorrerá distintas iglesias de Argentina hasta el 25 de este mes.
El rector de la Catedral de Buenos Aires, P. Alejandro Russo, presidió la Eucaristía acompañado de varios sacerdotes y manifestó que la visita de la reliquia de San Pío significa para Buenos Aires “el reencuentro con un viejo amigo”.
Durante la jornada también hubo rezo del Rosario y Misa por los enfermos, y lo mismo se realizará este 20 de abril.
El sábado 21 el corazón del Padre Pío será expuesto en el Santuario Nacional Nuestra Señora de Luján y se celebrarán tres Misas. También se realizarán bautismos y el Rosario meditado.
El domingo 22 la reliquia llegará al Santuario Nuestra Señora del Rosario de Pompeya, donde se realizarán tres Misas y se rezará el Rosario con meditaciones del Padre Pío.
Al día siguiente, los fieles trasladarán la reliquia hasta la Basílica Nuestra Señora de la Piedad donde se celebrarán Eucaristías, rezo del Rosario y una charla para niños a cargo de la Animación Argentina de los grupos de oración del Padre Pío.
El martes 24 la reliquia visitará la capilla Divino Niño del Hospital de Pediatría Profesor Doctor Juan Pedro Garrahan. Aquí se realizarán Misas, charlas para niños y para la familia a cargo del grupo de animación y de Fray Carlos María Laborde de la orden franciscana.
El último día la reliquia, que lleva por lema "Ecos de un corazón santo", volverá a la Catedral de Buenos Aires, para acompañar las Misas y el Rosario meditado.
La reliquia de San Pío
El Padre Pío nació en Pietrelcina (Italia) el 25 de mayo de 1887. A los 15 años decide ingresar a la Orden Franciscana. El 10 de agosto de 1910 es ordenado sacerdote. Falleció el 23 de septiembre de 1968.
En marzo de 2008 se realizó el reconocimiento canónico de los restos mortales de San Pío de Pietrelcina, encontrando muchos de sus órganos sin descomposición.
Uno de esos fue el miocardio, el músculo del corazón encargado de bombear sangre al cuerpo. Este fue apartado y venerado por primera vez el 21 de junio de 2009, cuando Benedicto XVI visitó San Giovanni Rotondo (Italia).
Según cuenta la historia, en septiembre de 1910 el P. Pío recibió la aparición de los estigmas.
Desde entonces y por 50 años, los estigmas estuvieron presentes en el cuerpo de San Pío de Pietrelcina hasta poco antes de su muerte.
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