, 05 Abr. 21 (ACI Prensa).- El Arzobispo de Los Ángeles y presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, Mons. José Gomez, explicó cómo los fieles deben vivir la fe en este tiempo de Pascua, marcado por la prueba de la pandemia del coronavirus.
“En esta Pascua, nuestro Señor nos está llamando a volver a él, nos llama a todos nosotros, los que formamos parte de la Iglesia a que vivamos como un ‘pueblo pascual’, nos llama a volver a la sencillez de vida que podemos ver en aquellos primeros discípulos”, dijo el Prelado de origen mexicano en la homilía de la Misa que presidió en la Catedral de Los Ángeles el Domingo de Resurrección.
“Como todos sabemos, estamos viviendo un tiempo de prueba. El mundo que nos rodea está cambiando. Seguimos con la situación de la pandemia y también con la realidad de un tiempo extraño y turbulento de nuestra sociedad. Sin duda, son señales de que las cosas son diferentes”.
El Arzobispo aseguró que “no estamos seguros hacia dónde va todo esto, pero sabemos dónde debemos de estar. Tenemos que estar cerca de Jesús, cerca de su tumba vacía, cerca de su Iglesia”.
Estados Unidos es el país más afectado en el mundo por el coronavirus con 31.429.560 casos, de los cuales casi 24 millones se han recuperado. El número de fallecidos es de casi 570 mil, mientras que en el plan de vacunación ya se han aplicado 157,61 millones de dosis.
El Arzobispo de Los Ángeles recordó en su homilía que “la Iglesia de los primeros años no vivía su fe dependiendo de programas o de iniciativas y actividades. Los primeros cristianos vivían su fe, sencillamente. La llamaban el ‘Camino’, la ‘Vida’. La Pascua era suficiente para ellos, era todo lo que necesitaban”.
Mons. Gomez resaltó que “vivir nuestra fe no es algo complicado. Empieza por vivir pensando en el amor tan grande que Dios por cada uno de nosotros. Confiando en el modo de vivir que él nos ha enseñado”.
“¡Queridos hermanos y hermanas, la vida de fe a la que Dios nos llama es muy sencilla!
Se trata de conocer a Jesús. Escuchar sus palabras, reflexionar sobre su ejemplo. Hablar con él en la oración para saber lo que quiere que hagamos y, desde luego, tratar de llevarlo a la práctica de corazón y con entusiasmo”.
El Prelado indicó que vivir la fe consiste en “amar a los demás, especialmente a los que están más cerca de nosotros. Sirviéndolos con un corazón humilde y teniendo misericordia y sabiendo perdonar. Amando a los demás sin esperar nada a cambio”.
Todo esto “siempre con el convencimiento de que Jesús camina siempre con nosotros. Que podemos en cualquier momento invocar su nombre y él extenderá su mano para levantarnos”.
En esta vivencia, el Arzobispo de Los Ángeles recordó la importancia de la Eucaristía y de participar en ella activamente para crecer en amor a la Iglesia. “Hemos de ser testigos de la Resurrección de Jesús invitando a los demás a que lo sigan en este admirable camino de vida”, subrayó.
Mons. Gomez dijo además que los cristianos “somos enviados a hablarle a los demás sobre el amor que conocemos, a predicar con el ejemplo, con nuestras obras, ¡con la alegría de nuestra vida!”.
“Que nuestra Santísima Madre María nos ayude a hacer de esta Pascua una nueva mañana para nuestras vidas, un tiempo en el que todos volvamos a la sencilla belleza de nuestra fe, ¡a la alegría de ser un pueblo pascual!”, concluyó.
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