VATICANO, 11 Ene. 22 (ACI Prensa).- La Diócesis de Roma condenó la manifestación pronazi que ocurrió ayer 10 de enero fuera de la parroquia Santa Lucía, donde un grupo de personas colocó una bandera con la esvástica sobre el ataúd de Alessia Augello, una activista de un partido de extrema derecha cuyo funeral acababa de concluir en la iglesia.
El Vicariato de Roma “deplora firmemente lo ocurrido ayer, frente a la parroquia de Santa Lucía, sin el conocimiento del párroco, el padre Alessandro Zenobbi, y de todo el clero parroquial, al final de la celebración de un funeral, que tuvo lugar sin ningún signo o manifestación que pudiera presagiar lo que ocurrió inmediatamente después”, manifestó la Diócesis en un comunicado publicado este martes 11.
Por su parte, en el mismo comunicado, el párroco de la iglesia Santa Lucía, P. Alessandro Zenobbi, expresó su “profunda tristeza, decepción y consternación por lo sucedido y se distanció de cada palabra, gesto y símbolo utilizado fuera de la iglesia”.
El lamentable hecho ocurrió el lunes 10 de enero afuera de la parroquia romana Santa Lucía a las 2:30 p.m. (hora local) después del funeral de Alessia Augello de 44 años, quien era militante del partido italiano de extrema derecha Forza Nuova.
El partido Forza Nuova ha sido criticado por varias de sus posiciones ideológicas, como el estar en contra de la inmigración y por los actos violentos en los que han participado algunos de sus militantes.
En un comunicado difundido este 11 de enero, la Diócesis de Roma, confirmó que el ataúd fue cubierto con una bandera nazi y condenó el uso de ese “símbolo horrible incompatible con el cristianismo”
“La instrumentalización ideológica y violenta, más aún la que sigue a un acto de culto y en la proximidad de un lugar sagrado, para la comunidad eclesial de Roma y para todos los hombres de buena voluntad de nuestra ciudad sigue siendo grave, ofensiva e inaceptable”, declaró la nota oficial.
Asimismo, la Diócesis de Roma subrayó que “lleva mucho tiempo trabajando con dedicación para formar, educar y así desactivar todo mecanismo de odio, oposición, tentación ideológica violenta y discriminatoria”.
Finalmente, la nota eclesial aseguró la “oración por el alma de la difunta” y expresó “cercanía a su familia, que experimenta el dolor de la separación terrenal”.
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